El estilo “vintage” (vendimia) está considerado como un concepto abandonado a una era específica. Los jóvenes, cada vez más, buscan y aprecian objetos únicos que representen parte de sus experiencias personales y emociones. Por eso, “vintage” ahora incluye una variedad de productos más amplia: como coches, motos, música, objetos, pubs, ordenadores.
Franklin & Marshall ha aplicado la misma perspectiva romántica a la ropa, como la manera más efectiva de auto expresión.
El vino es un producto vivo que cambia y mejora con el tiempo. Lo mismo pasa con “vintage”, un término que procede del francés “l’age du vin”, la edad del vino; y así es, Franklin & Marshall trata de crear un producto que puede existir y madurar a lo largo de los años. No como una tendencia, sino como la mejor manera de expresarse mediante la personalización de los gustos.
El "Vintage" Franklin, comienza en la ciudad de Verona en 1999. Aunque sus raíces culturales se sitúan en la América de décadas pasadas: en los años de consumismo de la post-guerra, en algún lugar entre la generación beat y Vietnam, entre el movimiento de los derechos humanos y el Pop Art, entre Kennedy y mayo del 68. Estos fueron ante todos años dorados para los jóvenes americanos que, en la universidad, tuvieron la oportunidad de descubrir el potencial humano. Ambiciones, cultura, música y deportes fueron caracterizadas por diseños originales: los grandes coches redondeados, la nevera roja de Coca-cola, las coloridas maquinas de discos de los bares, las maquinas de “pinball” decoradas imaginativamente y la segunda piel de la juventud: sudaderas, camisetas, camisas a cuadros, gorras de béisbol y bolsas de deporte.
Franklin & Marshall fue creada bajo el deseo de conservar símbolos del pasado, reviviéndolos con la misma distinción pero con diferente punto de vista. Como explican los creadores: “Vintage es un lujo cuyo valor proviene de que se resiste a ser arrastrado por la marea de la moda”. Es por eso que cada pieza adquiere valor individual, es adoptada por los jóvenes y combinado con experiencias de vida personales. Franklin and Marshall, a través de la investigación, el entusiasmo y una gran atención a la materia prima ha creado un producto entre la melancolía del pasado y lo moderno de hoy en día.
Cuando cae la tarde, tejidos como el tul, el terciopelo, el raso o la ecopiel se bañan en rojo y dorado, y nos ofrecen vestidos palabra de honor con paillettes, faldas tubo al más puro estilo años 50 o pantalones pitillo.
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